Muchas veces confundida con pintura vinílica comercial se aprecia en los inmuebles históricos, muchos restaurados y algunos conservados con sus técnicas y materiales antiguos, los muros enlucidos con cal son motivo de admiración y gozo para los que gustamos de enaltecernos de nuestro patrimonio cultural mexicano. Y es que la pintura a la cal bruñida con baba de nopal presenta un acabado brillante casi como una vinílica con la única diferencia de que, aunque su poder cubriente es similar al de una buena marca comercial, no posee uniformidad en su apariencia. Esta característica es un lujo que restauradores y conservadores desean, admiran y envidian de las técnicas de construcción antigua.
La baba de nopal o de cardón se coloca sobre pintura a la cal por medio de chulos, piedra bola o botellas de vidrio al frotarse repetidas veces con cierta velocidad de manera que el mucílago actúa como protección final al tener propiedades impermeables, también actúa como adhesivo natural que previene el rápido secado permitiendo alcanzar el máximo de las propiedades de los materiales, además, es un inclusor de aire, ya que mientras por un lado es impermeable al agua también permite la respiración natural de los muros y finalmente es un acabado de lujo, al realzar la naturaleza estética de los materiales de antaño. .
Los gremios antiguos que trabajan o han trabajado la pintura a la cal y el bruñido con baba de nopal saben que este último es esencial para completar el procedimiento adecuado que ayuda a preservar los edificios históricos. Para tal objeto se puede utilizar el nopal (Opuntia ficus- indica) o el cardón (opuntia subulata) abundante en los límites de los Estados de México e Hidalgo. La planta se corta en pedazos y se coloca con un poco de agua en un tambo hasta que suelte la baba, otro método utilizado es calentar la planta una vez trozada y sumergirla posteriormente en agua natural para extraer la baba. Cualquier método permite la obtención del mucílago que posteriormente es colocado como capa de protección sobre la pintura a la cal, bruñendo hasta lograr el brillo deseado.
Los métodos y técnicas empleados históricamente para la construcción y embellecimiento de nuestros bienes patrimoniales mexicanos son orgullosamente satisfactorios al poseer la naturaleza de origen de nuestro país, haciendo honor a la riqueza de nuestros variados ecosistemas y en particular la baba de nopal, dado que enaltece un símbolo nacional con gran identidad.
por Arq. Adriana Landero
