Dinero Blanco y la Banda Nacional
Gran revuelo casó la petición del polémico empresario multifacético Ernesto Coppel Kelly, mejor conocido como Neto Coppel, quien en pasados días mediante un video solicitó la regulación de la música banda en las playas de Mazatlán, Sinaloa, expresando que los turistas extranjeros se quejan del ruido que provocan sus instrumentos de viento, perpetuando así la paz de los turistas que vienen a las paradisiacas playas mexicanas a gastar “dólares” o “euros”. Como era de esperarse y fieles a un instintivo orgullo nacional los mexicanos no dudaron en expresar su molestia por dicho actuar recordándole al empresario que… “Más si osare un extraño enemigo profanar con su planta tu suelo, piensa ¡oh Patria querida! que el cielo un soldado en cada hijo te dio…” pues éste es México, para los mexicanos y esta es nuestra música, así que en un unísono punks, metaleros, rockeros o salseros han dejado sus diferencias de estilos musicales a un lado para unirse contra la llamada “Gentrificación”, la redes sociales se encendieron y no dudaron en aparecer todo tipo de memes, reels, tik toks como protesta de los símbolos celosamente custodiados por el imaginario colectivo mexicano, en este caso la banda Sinaloense, vale la pena indagar más a fondo este fenómeno, no solamente desde un punto de vista comunitario, también desde la perspectiva de las inversiones empresariales en áreas de alta demanda turística pretendiendo ver desde un ángulo ecuánime aquello que afecta directamente la economía de quienes vivimos en este país.
Primeramente debemos definir…
¿Qué es la gentrificación?...
El geógrafo Luis Alberto Salinas Arreortua, quien es investigador del Instituto de Geografía de la UNAM define a la gentrificación como: “…un proceso de reestructuración de relaciones sociales en el espacio. Hace referencia a que distintos sectores de la población con mayor capacidad económica se apropian de espacios urbanos que presentan ciertas cualidades, por ejemplo áreas verdes, buena ubicación, equipamiento, infraestructura y zonas culturales que son muy buscadas por el capital inmobiliario”.
Si bien es cierto que la discordia con el tema de la banda es un motivo para protestar, también lo es que este tema ha estado siendo una queja que ha tomado mayor impulso los últimos años especialmente en el área inmobiliaria llegando incluso a hablarse del llamado “cartel inmobiliario”, el acceso a las rentas en zonas determinadas de la Ciudad de México, estados con alta demanda de turismo ha “encarecido” los accesos a viviendas y rentas para la población productiva joven del país, trayendo como consecuencia un nivel de vida por debajo de la expectativa económica respecto a los ingresos de divisas y el incremento de extranjeros que adquieren propiedades en el país, además de vivienda una estadía permanente, con regulaciones poco estrictas respecto del ingreso, egreso, fiscalización y visado en México.
Para mucha población mexicana esto se permite por el tema de la moneda de origen “el dólar” siendo esto para los hoteleros, empresarios la ventaja del “dinero blanco”, pero no solo es esta cuestión, también lo es el trato desmedido hacia los extranjeros, trato desigual que se le da a los nacionales, como una especie de apartheid interno encabezado por el sector económico empresarial, si bien es cierto que los turistas representan un entrada muy importante para el sector turísticos, también lo es que los altos costos han imposibilitado al propio mexicano promedio acceso a los destinos más demandados a nivel internacional por los altos costos en comida, hospedaje, artesanía y zonas de recreación turística.
Ahora bien, es importante señalar la diferencia entre turismo y gentrificación…
El turismo es la actividad que realizan personas fuera de su país de origen, ciudad o estado para instalarse provisionalmente en otra con fines de negocios, ocio o placer los cuales directa e indirectamente generan bienes y servicios, mientras que en la gentrificación es la permanencia del extranjero de forma prolongada, adquiriendo servicios, propiedades y derechos en determinadas zonas, lo que incrementa los costos de la región por la valoración de su moneda, la Ciudad de México es la más valorada en este fenómeno, tan solo en lo que va de 2024, colonias como la Condesa, la Roma, doctores o Juárez los arrendatarios han optado por modelos de renta pensados más en costos extranjeros 4 de cada 5 espacios de renta inmobiliaria corresponden al modelo de airbnb, cuyos costos son más elevados que las rentas promedio tradicionales, no solo las grandes ciudades enfrentan este problema, en los llamados “pueblos mágicos”, los precios de las zonas se han elevado, en ambos escenarios la gente que no puede pagar estos costos debes ser desplazada a zonas más accesibles enfrentándose con el problema de la movilidad para las urbes o centros de trabajo.
118% han incrementado las rentas en zonas de alta demanda de la Ciudad de México.
En el caso del sector empresarial, lo que alegan son sus altas inversiones que depositan en hoteles, centros recreativos y promoción cultural en el extranjero, justificando los altos impuestos que depositan a Hacienda, defendiendo su derecho como empresarios mexicanos que generan empleos, muchos de ellos como se sabe políticamente no muy acordes al sistema de gobierno actual, creando una vez más una disyuntiva respecto al México que se quiere, el que se proyecta y en el que se debe vivir.
Mientras tanto la banda se ha vuelto la contestataria ante un problema que no tardaba tampoco en romper la pared y que Neto Copell únicamente facilitó…la gota que derramó el vaso, se dice popularmente, era cuestión de tiempo, inevitable frenesí de inconformidades y realidades en la tierra de la furia, esta vez en la zona caliente de Sinaloa donde la banda sale en defensa de la banda.
Lo cierto es que los nuevos modelos de negocio están avanzado de manera vertiginosa como el mundo actual, su paso es tan veloz que los sectores menos favorecidos se siguen quedando más atrás haciéndose cada día más grande la brecha social, pandemias, caídas económicas, avances tecnológicos, cambio de monedas, desabastecimiento alimentario, no es por alarmar pero el panorama sigue siendo muy desalentador para las generaciones activas actuales, es decir un golpe más para los millennials.