*Hace 42 años, uno de los últimos ideólogos del viejo PRI, don Jesús Reyes Heroles, advirtió que “el México bronco, violento, mal llamado bárbaro, no está en el sepulcro; únicamente duerme”.
*Aparejado al rotundo éxito de la marcha del Frente Nacional Anti-AMLO que tomaron el Zócalo, López Obrador sigue perdiendo la batalla en las redes sociales y los medios internacionales.
(A las hijas e hijos, nietas y nietos, familiares y amigos de don José Martínez Bastida, El viejo sabio, maestro y amigo de una generación de compañeros amigos-hermanos triunfadores y exitosos.
Para varios de los cuales terminó la guardia en la redacción, Jesús, Evaristo, Mauricio, Narciso. Un abrazo fraterno y solidario a todas y todos)
En tiempos oscuros de devastación sanitaria, económica, política y social, reaprender de las grandes lecciones de vida de la historia, madre y maestra de los seres humanos, siempre será un faro de luz.
Dada la creciente polarización económica-político-social caminamos al abismo, como resultado de la no menos creciente y grave descomposición ética, reflejada en la debacle de la moral republicana.
Y caminar al filo de la navaja hacia el precipicio, es echar gasolina al fuego de la división provocada por las inconformidades sociopolíticas, que finalmente han conducido a México al enfrentamiento.
Como siempre el gran ganador será Estados Unidos con Donald Trump, que difícilmente se podrá reelegir o bien, con Joe Biden. Republicanos y demócratas mecen la cuna de la violencia en México.
Biden tiene 10 puntos de ventaja, según Reuters/Ipsos. Lo peor para Trump: el 65% de los votantes, incluyendo a 9 de 10 demócratas y 5 de 10 republicanos, coinciden que se infectó por negligente.
Hace 42 años, uno de los últimos ideólogos del viejo PRI, don Jesús Reyes Heroles, advirtió que “el México bronco, violento, mal llamado bárbaro, no está en el sepulcro; únicamente duerme”.
“No lo despertemos. ¡Todos seríamos derrotados si despertamos al México bronco!”, alertó el pensador tuxpeño, el más brillante intelectual, político y líder del PRI del último medio siglo.
El 5 de febrero de 1978, en el 61 Aniversario de la promulgación de la Constitución dijo que la única vía para ejercer la Justicia en México, es completar la democracia política con la democracia social.
Las sabias palabras del entonces secretario de Gobernación, hoy, casi medio siglo después parecieran empezar a hacerse realidad desde el gobierno de la 4T y de amplios sectores opositores.
Ensoberbecido por su aplastante triunfo, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha convertido sus conferencias “mañaneras” en Palacio Nacional, en el máximo tribunal de justicia popular.
Durante dos años ha buscado infructuosamente justificar su rotundo fracaso como gobierno federal. Los resultados no sólo son adversos en la administración, sino en su gabinete y su partido, Morena.
A dos años del gobierno de la 4T, hoy por hoy, cada día que pasa se fortalece el riesgo que México se le deshaga en las manos al presidente AMLO, con la ruptura del Pacto federal por diez estados.
Los mensajes en las benditas redes sociales le condenan: Si hablan de fracaso, este es el verdadero rostro. ¡No hay más! Más de 70 mil muertes y más de 700 mil contagios por la pandemia COVID-19.
Más de 60 mil muertes violentas, debido a la inseguridad. Más de 10 millones de desempleos y decreciendo la economía al 10%. ¿Si esta amarga realidad no es un fracaso, qué es, entonces?
Ello, se agrava con los miles de niños con cáncer en México, siguen padeciendo el desabasto de medicamentos en el sector salud, por el desmantelamiento del abasto y las fallas en la compra.
A pesar de supuestamente odiar al ex presidente Carlos Salinas de Gortari, en más de una ocasión Andrés Manuel López Obrador ha validado, en los hechos, aquello de (yo) “ni los veo… ni los oigo”.
En su último informe de gobierno, en septiembre de 1994, su odiado antecesor priista y neoliberal evidenció su desprecio por los airados reclamos y señalamientos de los legisladores de izquierda.
Andrés Manuel López Obrador no entiende que no entiende que, a querer o no, le guste o no, es presidente de todos los mexicanos. Obsesionado con mantener el poder continúa en campaña.
Aparejado al rotundo éxito de la marcha del Frente Nacional Anti-AMLO (FRENAAA) que tomaron el Zócalo, López Obrador sigue perdiendo la batalla en las redes sociales y los medios internacionales.
Más del triple de la cantidad que pidió AMLO para renunciar, ni un solo acto de vandalismo, los negocios del centro abiertos, hermandad entre mexicanos de diferentes estratos sociales y etnias.
El centenario periódico londinense Financial Times (@FT), advierte: Si @lopezobrador no cambia el rumbo, México “corre el riesgo de volver a caer en un pasado más pobre, oscuro y represivo”.
Dolorosamente, los diversos medios de comunicación mexicanos en prensa, radio y TV parecen estar sometidos por @lopezobrador_ Únicamente Reforma, El Sol y el Universal, informan!
Bastó ver los noticiarios de radio y televisión el sábado y las portadas de ayer en los medios impresos! De la marcha de FRENAAA, mienten a la audiencia, Televisa, Azteca, Milenio e Imagen!
Es de lamentar que las protestas llegan a “ojos ciegos y oídos sordos”; el del “nombre registrado” ni escucha ni mira, solamente vomita su verborrea de mentiras y falsas promesas que no cumplirá.
Su único interés es mantener en alto su popularidad; “eterno candidato en campaña político-electoral permanente”. Proliferan los hashtag críticos #LópezUneAMéxicoEnContraSuya.
@efektoaguila
