Las viejas prácticas del PRI; el último clavo de su propio ataúd
Dicen los que saben: “Pueblo que desconoce su historia, está condenado a repetirla”, esto es cierto, en el PRI los viejos priistas (dinosaurios) y los bebesaurios no han entendido o no han querido aceptar que todos los errores que cometieron por décadas los llevó al umbral de la sepultura y, hoy que los jóvenes tricolores (Erikos) quieren rescatar a su partido, se topan con esa viejas costumbres y los vicios de los cánones que son herencia para seguir teniendo secuestrado al que fue el partido de las mayorías.
Juzgue usted.
Con la renuncia de Lorenzo Rivera Sosa se dice en los corrillos políticos que la lista de los que pretenden levantar la mano para dirigir al CDE del PRI, suman 12, algunos dicen que son quince, mismos que son secretarios de los dinosaurios, algunos amigos, otros compadres y uno que otro empresario dispuesto a comprar el puesto para su futuro líder estatal y de esa manera lograr un escaño en la política. ¿Y la militancia? ¿Y las bases que realmente trabajan a dónde están? Leyó usted bien; esos que ayer fueron jóvenes y hoy están a un paso de engrosar las filas de las personas de la tercera edad, a dónde quedaron, porqué jamás fueron invitados a la repartición del pastel, por qué no los llaman y les preguntan a quién quieren como su dirigente estatal, por qué los bebesaurios tienen que poner a sus gentes como líderes municipales y realizar reuniones con el delegado nacional para que éste vea el musculo que tiene quien aspira a dirigir al PRI.
Esas bases, esa militancia, mejor dicho Juan pueblo, ya levantó la voz y dijo “si siguen con sus imposiciones y quieren poner a gente que ha hecho negocios para servirse y que jamás nos sirvió a nosotros como pueblo que somos, y como gente que nos rompemos la madre ante las inclemencias del tiempo, para que lleguen a ser diputados, presidentes municipales y hoy quieren dirigir el partido; nosotros no los vamos a apoyar”. Leyó usted bien, no van apoyar a gente impuesta, éste tunde teclas les da la razón, por qué tienen que ser siempre los mismos, ayer eran dinosaurios, hoy son bebesaurios y los que han servido a su partido por dos o más décadas por qué no los dejan llegar, por qué no les dan la oportunidad de que demuestren su talento y experiencia al servicio del pueblo.
Todo esto tiene su origen porque dentro del partido tricolor ya empezaron las patadas y pellizcos bajo la mesa, se empezaron a dar hasta con la cubeta, al grado que la fórmula de los Erikos piden que salga un candidato de unidad, sin embargo se dice también que posiblemente sea una consulta de delegados, entonces de esos 12 ó 15 se van a reducir posiblemente a cuatro aspirantes, para dar paso a tres, siendo el tercero en discordia y que va a ser el que venga palomeado desde el CEN del PRI, con el apoyo de fuertes tribunos nacionales y de líderes de las grandes ligas de la cúpula política.
Regresando al comentario que hizo la militancia del por qué no apoyarán una imposición; analícelo usted:
Después de que Néstor Camarillo presentó su renuncia o permiso al partido para contender por la dirigencia del instituto político, luego, luego, se sumaron a apoyarlo Blanca Alcalá, Javier Casique, Enrique Doger y Jorge Stefan Chidiac, entre otros, mismos que fueron mal vistos por la militancia y las bases tricolores que son quienes trabajan para apoyar a todo político.
Palabras más, palabras menos, juzgue usted mismo: “hace tiempo trabajamos para Blanca y ni las gracias nos dio, después apoyamos a su hija y ahora ni nos ven ni nos oyen, lo mismo ha pasado con Doger; un doctor de Teziutlán que lleva más de veinte años trabajando y apoyando a cuanto político se le acerca ofreciéndole el espejo y el moro, también dio el manotazo y aseguró “ni un apoyo más a gente corrupta que solo se ha servido de nosotros y no nos han servido, solo nos buscan para lograr su escaño y no los volvemos a ver. La líder de Barranca Honda, sostiene “no nos pagan lo que realmente debemos ganar, nos dan lo que quieren y hasta que quieren, nos ofrecen apoyos que jamás vemos llegar y todavía nos engañan diciendo tú vas a ser diputada; treinta años llevo apoyando y sigo esperando, por eso no vamos a apoyar a Néstor Camarillo, está rodeado de puros vividores de la política y si lo imponen que no cuente con nosotros”.
Estas imposiciones apoyadas por los dinosaurios y bebesaurios como es el caso de Lorenzo Rivera Nava que iría en fórmula con Xitlalic Ceja, no son aceptadas por los que realmente hacen el trabajo de posicionamiento para los políticos, si a eso le suma usted la reunión que tuvo el delegado nacional del PRI en Puebla, Américo Zúñiga con Leobardo Soto, con todo respeto dice mi amigo y colega de varios ayeres: “es el último clavo del ataúd del PRI”.
Sí amigo lector, las viejas prácticas del PRI son el último clavo de su propio ataúd, hay algo muy importante que usted debe analizar: para este humilde servidor le queda claro que el PRI no quiere ganar, claro que no, por eso están apoyando la imposición, por eso la reunión de Américo Zúñiga con Leobardo Soto; haga usted memoria, Jorge Stefan Chidiac desvío recursos públicos para apoyar la campaña de Luis Miguel Barbosa Huerta, hoy gobernador mal posicionado. Leobardo Sotos deja morir al PRI y a Alberto Jiménez Merino cuando buscó la gubernatura, para apoyar con su gremio cetemista a Luis Miguel Barbosa; esto como lo llamaría usted: ¿Traición o componendas para seguir entregando el poder a MORENA? ¿Alito estará de acuerdo?, con todo respeto yo veo que sí y solo nos da atole con el dedo.
Para terminar mi comentario solo quiero decirle que al final de la recta van a ir Néstor Camarillo, Xitlalic Ceja y los Erikos, de estos tres aspirantes quedarán dos y entrará el tercero en discordia, que es el que no hace ruido, no se mete al golpeteo y solo está esperando la señal para llegar como cuchillito en mantequilla, sí, suavecito…suavecito y será ¿una mujer? Quien cambie el rumbo del PRI o lo sepulte definitivamente. Seguiré informando.
Por Tomás de los Santos H.
