Un antes y un después
En la Fórmula 1 hay carreras que se quedan para siempre en nuestras memorias. Hay rebases que nos hicieron vibrar y victorias que nos hicieron gritar de emoción. Pero ¿Qué pasa cuando un piloto marca época y se queda en la memoria de millones de aficionados? ¿Qué sucede cuando un piloto, un solo hombre, marca un antes y un después en la Fórmula 1? ¿Qué sigue cuando un piloto vive de alguna forma por muchas generaciones más? Ese hombre es Ayrton Senna.
Han pasado 30 años
La trayectoria de Ayrton Senna es una de las más apasionantes en la historia de la Fórmula 1. El piloto brasileño logró 3 títulos mundiales con el equipo de McLaren y protagonizó una de las más aguerridas y legendarias rivalidades a lado del francés Alain Prost. Condujo para equipos como Toleman, Lotus, McLaren y Williams, este último, equipo con el que terminó su trayectoria y su vida. Y aunque podría escribir durante horas sobre Ayrton Senna, sobre el que es considerado por muchos, el mejor piloto en la historia, hoy más que nunca, el nombre de Ayrton Senna significa mucho más que 3 campeonatos, 41 victorias y 80 podios. Hoy se cumplen 30 años desde aquel fatídico accidente en el circuito de Imola en Italia, en la curva de Tamburello, cuando Senna lideraba la carrera a bordo de su Williams FW16… se cumplen 30 años desde que el piloto brasileño impactó el muro de hormigón del autódromo Enzo e Dino Ferrari a más de 200 km/h.
No puedo retirarme, tengo que seguir
Y es que si regresamos el tiempo al 29 de abril, dos días antes del fatal accidente de Senna, el también brasileño Rubens Barrichello tuvo un aparatoso choque cuando se despistó en la Variante Bassa y perdió el control de su monoplaza a 225 km/h. Afortunadamente sobrevivió al percance aunque sufrió una rotura en un brazo y en la nariz, lesiones que lo dejaron fuera de las actividades del fin de semana.
Un día después, el 30 de abril, el piloto austriaco Roland Ratzenberger perdió la vida al impactarse en un muro de hormigón, esto mientras Senna observaba en la pantalla de su garaje el aparatoso accidente. Y es que curiosamente en el Briefing, que es una reunión previa al Gran Premio que sostienen los pilotos con los directivos, jefes de equipo y comisarios de carrera, para determinar las condiciones bajo las que se correrá el Gran Premio, Senna fue el primer piloto que votó por suspender la carrera y pedir que no se corriera el Gran Premio. Esto causó sorpresa entre los demás pilotos porque resulta que Imola era uno de los circuitos en los que mejor se desempeñaba Ayrton. Incluso Sid Watkins, jefe del equipo médico en pista de la Fórmula 1, intentó convencer a Senna de no correr, pero el brasileño le dijo: ”Sid, hay ciertas cosas sobre las que no tenemos control. No puedo retirarme, tengo que seguir”.
Sin responsables
Todo esto me pone a pensar… ¿era el destino de Senna correr y morir en la curva de Tamburello? Y es que todas las señales para que Senna abandonara la carrera se presentaron a lo largo de todo el fin de semana. Desgraciadamente el impacto fue mortal. El piloto brasileño había pedido que se le hicieran modificaciones a su monoplaza en la barra de dirección para que pudiera sentirse más cómodo al conducir. Después del accidente se determino que la adecuación no resistió y la barra de dirección se rompió, provocando que Senna perdiera el control del auto y se impactara contra el muro y además la barra de la suspensión golpeó el caso del piloto causándole una ruptura en la base del cráneo. Aunque hubo presuntos culpables todos fueron declarados absueltos.
Las leyendas
Las leyendas nunca mueren
Después del accidente vino una revisión exhaustiva sobre los protocolos de seguridad para evitar que un accidente del mismo tipo, acabara con la vida de otro piloto. ¿Por qué digo que Senna fue un antes y un después en la Fórmula 1? Simplemente porque en pista lo consiguió todo. Y no me refiero a los números o a las victorias. Senna consiguió dejar sin aliento a propios y extraños.
Fue un piloto apasionado, disciplinado, técnico, con un instinto sobrenatural para atacar las curvas. Pero su legado ha trascendido generaciones y después de su muerte, se volvió en inspiración y referente para grandes campeones como Schumacher, Hamilton, Alonso y Vettel. ¿Era necesaria la muerte del piloto brasileño para que hoy en día el nombre de “Senna” tenga la relevancia que le damos? Quizá si. Y es que Senna murió en el climax de su carrera, regalándonos el mejor recuerdo que podemos conservar de él. Luchando en pista. Y es por eso que hoy podemos decir que Senna es un mito, una leyenda… y las leyendas nunca muren.