Redacción, Pablo Sánchez
Colaborador de Arenga Medios
A finales del mes de abril, el gobierno de los Estados Unidos decidió donar vacunas de la farmacéutica AstraZeneca a países en vías de desarrollo, incluyendo México, esto como respuesta a la presión impuesta por las instituciones internacionales que pedían a Estados Unidos compartiera y donara las vacunas que había producido, ya que actualmente más del 60% de la población estadounidense tiene aplicada la primera dosis.
En enero pasado los estados de Florida, Nueva York y Washington, fueron las primeras identidades que comenzaron a aplicar vacunas, en donde no se pedía un documento que avalara la residencia. Los pobladores de los estados comenzaron a manifestar su inconformidad y poco después dejaron de suministrar a las personas de exteriores. Ahora, son más de 19 entidades que permiten suministrar vacunas a personas que no residen en Estados Unidos, Texas, Luisiana y Arizona, han invitado a la población que no es residente a aplicarse las dosis, por su parte el estado de Colorado ha tomado la postura de no compartir información recabada con fines de inmigración.
El gran flujo de personas que va a Estados Unidos para vacunarse proviene de México y Latinoamérica, precisamente de países en vías de desarrollo, en donde los planes de acción de vacunación no son los mejores o bien las filas para aplicarse la vacuna son de meses. Con la gran respuesta de los turistas que van a Estados Unidos, las empresas de viajes arman paquetes que incluyen vuelo, hospedaje y vacuna, que oscilan alrededor de los 20 mil pesos mexicanos, la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes AMAV, recomienda que antes de contratar un servicio de este tipo, se debe de verificar si la agencia tiene enlaces con el estado que asegure la vacuna contra el COVID-19.
Pero ¿quiénes pueden acceder a la vacuna realmente? Las únicas personas que pueden acceder o llegar a ellas, son las personas que tienen los medios económicos para costearse un viaje alrededor de 15 mil a 20 mil pesos mexicanos, aquellos de clase media alta y alta. Y otra incógnita surge ¿Quién es la clase media en México? Según el New york Times el 61% de la población en México creé que es de clase media, pero realmente solo cerca del 19% lo es, el Estado mexicano ha hecho creer a la sociedad que lo que gana es lo justo, cuando en realidad en materia de salarios, México ocupa lugares muy lejanos al primero.
Entonces, cerca de menos del 10% de la población mexicana puede acceder al turismo de vacunas. La vacuna es gratuita, pero realmente para poder acceder a ella cuesta, ya que son necesarios trámites de visa, pasaporte, prueba de PCR para viajar, vuelo, hospedaje, etc. En gran parte de la población son incosteables y esto lleva a simplemente una acción, esperar en la larga fila, para poder obtener nuestras dosis en nuestro país.
La respuesta por parte de los internautas en redes sociales es variada, pero no se muestra una molestia con aquellos que van a Estados Unidos a vacunarse, ya que la idea de que el problema a causa del coronavirus es global, se deja aun lado la brecha social y se menciona que los que tengan el tal llamado ‘privilegio’ se puedan vacunar, ya que se piensa que entre más personas sean vacunadas, es mejor para mitigar la situación en la hemos estado desde hace un año.
En sí, el tal llamado turismo de vacunas es para pocos, pero que ayuda a que avance más rápido la inmunización de México y Latinoamérica, países en donde hemos visto que las estrategias de vacunación no son las más eficaces y lo que queda para algunos simplemente es esperar su dosis.