Espacios psicológicamente arquitectónicos
La psicología y la arquitectura establecen el vínculo entre el ser humano que interactúa con su medio ya que tiene que ver, con las diferentes estructuras con las que convive la persona en el transcurso del día, hogar, oficina, escuela o lugares de esparcimiento.
Fue Kurt Lewin, uno de los primeros psicólogos que le asigna la importancia a la relación que se produce entre los individuos y el medio ambiente, introdujo en su teoría de Campo el concepto de espacio vital para referirse a todo aquello que puede afectar en la conducta del sujeto.
En el marco de la psicología, el concepto espacio vital, remite a esa zona de seguridad que tiene un ser humano, ese núcleo íntimo y personal que le es propio, en el que comparte sus inquietudes y anhelos con otras personas, que también forman parte de él, gracias a ese vínculo de proximidad. Es importante puntualizar que este sitio tan confortable, también va evolucionando y cambiando a lo largo de los años.
El hogar representa el espacio vital, el tipo de construcción, la decoración y el estilo elegido, muestran la personalidad del individuo, es como un libro abierto, reflejo de nuestro ser interior; pero también, es el lugar donde experimentamos una seguridad plena, nuestro refugio en momentos difíciles o después de una jornada laboral estresante.
Cada objeto de nuestro hogar simboliza cómo somos, nuestros gustos, actitudes, metas, valores, roles sociales y prioridades en la vida. Todo lo que hemos elegido, de cierta forma, despiertan emociones que nos resultan agradables y por tanto, hablan de nuestra historia y de quiénes somos.
Un regalo espacial para el hogar
La arquitectura del hogar se embellece eligiendo todo aquello que nos hace sentir bien, los detalles que son importantes y que generan emociones agradables.
Decorar cada rincón con amor, armonizando con los colores, para generar un ambiente cálido y de buena vibra. Hay que atreverse también a jugar con diferentes materiales y texturas que influyen en cada uno de los sentidos para transmitir un gran confort a nivel físico.
No hay que olvidar que la iluminación es uno de los aspectos importantes en la decoración, ya que aporta sensación de calor de hogar. Cuando se requiere una luz más tenue para algunas áreas específicas, se puede utilizar velas, ya que son perfectas para crear intimidad, romance y propiciar la relajación o al seleccionar un aroma especial, que al entrar a casa nos reciba con una bella fragancia, esto le dará un toque de identidad al hogar.
Otra sugerencia es elegir un lugar exclusivo como nuestra zona privada, que nos haga sentir a gusto. Hay que colocar objetos con los que nos identifiquemos y que resulten inspiradores. Este sector debe transmitir la sensación de confort, paz, tranquilidad y seguridad. Un sitio donde se pueda disfrutar de nuestras canciones preferidas, leer un libro o tomar una taza de café.
Si el hogar no es lo que se espera, hay que darse a la tarea de transformarlo y recordar que la psicología en la arquitectura es un valioso aliado para lograr los objetivos y disfrutar de un lugar único y especial.
“La Arquitectura no son cuatro paredes y un tejado, sino el espacio y el espíritu que se generan dentro” Lao Tsé
Por Psic. Raquel Estrada
Psicoterapeuta y Orientadora en Tanatología
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