Cuando Amy volvió a ella
Back to black es el título de la película acerca de la vida de Amy Winehouse que actualmente se encuentra en cartelera, obviamente se trata también del nombre de una de las exitosas canciones de esta controversial cantautora, quien murió a los 27 años de una intoxicación etílica. Sí, les estoy contando el final; pero desgraciadamente todos ya lo sabíamos.
Lo interesante de ir a ver un biopic de un grande de la música comercial, como fue el caso de Elvis (Elvis Presley), Rocketman (Elton John), Bohemian Rhapsody (Fredy Mercury) o La vie en rose (Edith Piaf) es por supuesto la realización; lo que hace que vayas a ver un filme acerca de estos personajes, casi todos muertos (excepto Elton John) es el ángulo desde donde lo trata el director e incluso qué sorpresas nos da el guionista. Desafortunadamente, Back to black es un black un tanto descafeinado, pues no se entiende claramente cuál es la intención, qué nos quieren decir exactamente sobre Amy.
Back to black
Sin ser experta en el tema, creo que lo que más vale la pena de esta biografía es la música. Me refiero a la producción dentro de la película. Tratando de darle un poco el beneficio de la duda a la cinta, digamos que el motivo que la inglesa tuvo para la composición de cada canción es lo que lleva a ir construyendo la narrativa en la pantalla. El resultado es una muy buena banda sonora que valdrá la pena conseguirla (Según sé, estará disponible incluso en vinyl).
En cuanto a las actuaciones he de decir que Marisa Abela sí logra hacernos ver a Amy WineHouse, incluso con la voz. El resto del reparto: Jack O’Connel, Eddie Marsan, Juliet Cowan y Lesley Manville son viejos conocidos actores ingleses, quienes han sido nominados o hasta premiados en varias ocasiones por sus buenos papeles en diferentes ocasiones.
Sam Taylor-Johnson es la directora de este drama, que desde mi humilde sillita -diría Mafalda- no profundiza, se queda en la anécdota, en una historia que bien se podría resumir así: Érase una vez una chica inglesa que fue muy famosa porque cantaba muy bien, pero era alcohólica y se murió joven por ello. Y no es que la directora haya fallado. Al parecer a los familiares de la intérprete de R&B no les gustó cómo se trató el documental Amy (la chica detrás del nombre), así que en esta ocasión todos los personajes son igual de superficiales y hasta un poco fríos, sin responsabilidad alguna sobre las acciones de la joven artista. Al final, igual que en Elvis o Marilyn, la trama te deja una sensación de personas inmaduras, ignorantes con un gran corazón, pero muy solas, sin nadie que realmente les apoye o les guíe.
Back to black
Por como muestran la personalidad de Amy descuidada, voluntariosa, co-dependiente de los hombres e impulsiva, al parecer solo quería hacerle honor a su apellido; no me refiero por ser de familia judía, sino porque hay un juego curioso de palabras en Wine (vino en inglés) House (casa) y ser alcohólica. El chiste malo es mío, claro. Sin embargo, lo que quiero decir es que aquella joven que rompió records con temas como Rehab o Valerie y que fue ganadora de cinco premios Grammy en una sola noche, debió tener algo más de genialidad que la simple locura.
Sin duda, anacrónica (como ella se autodenominaba) con su estilo sesentero, Amy tenía un alma de blues, jazz y soul. Estas personas creativas ven el mundo de distinta manera a como lo vemos el resto. Para mí existen tres casos en particular, entre muchos que ha habido en la industria del espectáculo, de intérpretes muertos por excesos de alcohol o drogas, que definitivamente me siguen dando mucho coraje; no entiendo cómo pueden privar a su público de sus talentos. Y me refiero a intérpretes porque son un actor: Phylip Seymur Hoffman y dos cantantes con magníficas voces: Whitney Houston y Amy Winehouse.
Así que esta vez salí de la oscuridad de la sala del cine tarareando un poco las canciones de Amy, mas no satisfecha ni emocionada del todo. De hecho, voy a decir algo que para una defensora del cine en el cine podría ser horrible en otras circunstancias, pero es que de verdad esta película no nos deja maravillados: Back to black bien podría ser de plataforma y no pasaría nada. Intentaré ver el documental Amy (ganador del Óscar como documental largo en 2015), el cual puede verse en Apple TV, apuesto a que nos dará un mejor sentimiento hacia la vida de esta cantante que prefería el jazz sobre el rock.
